Al introducir aquella llave por la cerradura de esa vieja puerta, John cerraba los ojos e imaginariamente se transportaba a un mundo sin tiempo, solo bastaba girar la llave, abrir y escuchar crujir el piso de madera con el primer paso, Su respiración se detenía al sentir el aroma familiar del el lugar que lo albergaba cada noche.
Al prender la luz encontraba todas las fotos que con mucha delicadeza en el ritual del revelado las había obtenido desde hace mucho tiempo atrás. El fotógrafo era el dueño de imágenes que capto en momentos precisos de alegría, tristeza, preocupación y muerte. Su obra de arte se plasmaba en todas las habitaciones de su casa pegando cada foto en las paredes de la vieja casona, No existía ni una porción de pintura que sobrara si no era tapada por una foto. Solo la ventana que daba a la calle y el pequeño baño no eran obstruidos por el mural de retratos.
Algunas de las fotos estaban deterioradas por el tiempo de un sepia natural por la humedad, en algún momento habían tenido el blanco y negro reluciente, John suspiraba al ver sus viejos retratos de rostros; Alegres, serios y preocupados de gente común y desconocida pero que significaban mucho para él.
John o el viejo como lo conocían los vecinos, es fotógrafo desde hace más de 45 años, empezó con su vieja cámara que le compro a un Ingles en 1959 en el puerto del Callao. Desde ahí ha tomado millones de fotos de las cuales siempre sacaba una copia para su colección personal, al verlas, apreciaba el rostro de la gente: Niños, Mujeres, Hombres, Ancianos, cada uno de ellos con diferente tipo de expresión y posturas. Todas sus fotografías fueron tomadas desde el 59, en ese tiempo Lima era novedosa por su tranvía y sus plazas ordenadas y limpias. El tiempo despinto los cabellos de John de negros a blancos la barba ceniza y el cansancio de la vejez que al igual que sus fotos se pronunciaban mas cada día.
Ya nadie visitaba a John pero la última vez que alguien paso a saludarlo fue Alfredo uno de sus poco amigos, esto fue en el 92, Alfredo era psicólogo y le dio un perfil del porque John tenia tendencia a volverse introvertido y de alejarse de la gente y solo se obsesionaba en pegar fotos. Alfredo le comentaba lo siguiente: John de a pocos te estás aislaba del mundo físico porque te cuesta mucho entender la realidad. A partir de ahora experimentaras lo contrario al mundo real, tendrás mucha compañía de estas personas que vez en las fotos y este será tu nuevo mundo, Alfredo se fue y se despidió de John con un fuerte abrazo porque pese a todos sus intentos dejo que John sea como es.
Todas las noches John tenía el mismo ritual, tomaba vino y se recostaba en su vieja cama, solo bastaba cerrar los ojos y sentir que todas los personajes salían de sus fotos con aquellas vestiduras congeladas en el tiempo, todos caminaban en la pequeña habitación, El dueño de Imágenes sabia que estaban ahí y sin abrir los ojos los escuchaba murmurar, Pero al final se convertía en una bulla perturbadora de muchas voces que no se entendían. En su trance se levantaba de su cama se agacho un poco, movió su cabeza hacia la derecha y pego su nariz hacia una foto. Era de una señora que sale sentada en una banca del campo de Marte, se llamaba Irma y fue tomada el 16 de Julio de 1960.
- John pregunta, Irma porque esa tarde te note preocupada y te insistí para tomarte esta foto???
- Irma respondió: Porque ese día mi esposo nunca llego al parque, los militares lo confundieron como aprista, lo encerraron y nunca más supe de él.
John no respondió a Irma solo camina con dirección a otra foto esta se encontraba por la puerta del baño, se agacha hasta el suelo pega su nariz a la foto tomada en 1970; Era un niño distraído con su mama en la Plaza Francia.
- John pregunta: Niño porque miras a otro lado no me permitiste tomarte una buena foto????
- El niño responde: Porque miraba aquella manzana encaramelada que mi mama no quiso comprar.
Sin perder el tiempo se levanto del piso sin mirar y en medio de los comentarios de todos los personajes de las fotos cogió una silla y se subió hasta lo más alto del cuarto; pego su nariz a la foto de una dama muy joven y alegre quien sonreía.
- John Pregunto: Raquel, mí amada Raquel, porque me sonríes así????
- Ella respondió: Porque ese día me prometiste que nos casaríamos, no cumpliste tu promesa, Te amo John, ya es hora que vengas conmigo.
Después de días el casero tocaba a la puerta del viejo John, nadie contestaba al llamado, el casero no aguanto la duda y con la llave auxiliar abrió el viejo cerrojo, entro y encontró todas las fotografías en el suelo. Solo una permanecía pegada en la pared cerca de la cabecera de la cama de John, era la misma foto de Raquel sonriendo pero esta vez con John a su lado, Era una de esas fotos que resaltaba mucha felicidad al parecer John regreso al sitio donde pertenecía, Su mundo irreal le dio otra oportunidad de encontrar a su amada.
Roco
