miércoles, 7 de abril de 2010

MI EX


Hoy estaba en la oficina y sonó el timbre del teléfono, al contestar escuché una voz familiar era mi Ex. Hace mucho que no sabia de ella y me contó todo lo referente de su regreso a Lima, ella estuvo viajado durante mucho tiempo, recorrió varios lugares: USA, Chile y Australia. Me dio la sensacion que tenia una vida de Gitano al no tener una ciudad estable donde residir, me explica el porque del cambio de ciudad; se debe a la demanda de trabajo que su esposo realiza (pienso; que suerte, cuanta plata debe tener para vivir en diferentes lugares).

Ella esta ahora casada y con dos niños, me cuenta lo que le paso durante todo este tiempo los buenos y malos momentos, la vida en familia y sobre todo la gran experiencia de ser mama, volviendo al pasado recorde que fue algo con lo que ella siempre soño, me alegre y la felicite.

Yo le conté de mis cosas; trabajo, mis amistades, el grupo y mi abrupta partida de la casa de mi madre para seguir mi vida de forma independiente, ella escucha con la paciencia que siempre tuvo. Termino de hablar y ella me aconseja inmediatamente con cierto aire de padre experimentado; empieza a explicarme y me da una catedra de lo que es bueno y malo, me guia con sus consejos y hasta predice mi futuro de una forma única paranormal, me quedo en silencio porque yo veo mi futuro incierto. Una vez me dijo que siempre estaría perdido y creo que no se equivoco.

Por un momento imagine vernos juntos, pero me di cuenta que las cosas ya no serian las mismas, ambos somos totalmente diferentes poco tolerantes a lo que alguna vez fuimos, aunque yo de terco le dije que seguía siendo el mismo.
Me di cuenta que siempre teníamos algo en común: el carácter, toda la vida imponiendo cosas, eran opiniones divididas sobre diferentes temas, dinero, familia y carrera. me pregunto: como pido aguantarme 10 años?
Pero bueno no todo eran recuerdos negativos, hay buenos momentos también; en el 92 cuando empezamos a necesitarnos, los días eran perfectos no existían preocupaciones (nuestros viejos pagaban todo). Era nuestra época del encanto mágico que solo a los adolecentes lo sienten con mas fuerza, y era verdad sentíamos que los dos podíamos contra el mundo.
Un día en su casa nos reunimos con el grupo de marketing, haciendo unos papelografos cruzamos miradas y a propósito dejamos caer lapiceros cada uno se agacho a recoger y por debajo de la mesa (nadie sabia que estábamos) nos dimos un beso complice de la travesura. Al finalizar el día nos sentamos en su puerta a ver las estrellas; ella puso su cabeza en mi hombro y nos quedamos en silencio, recuerdo que esa noche la observe detenidamente y pensaba que la relación nunca terminaría y siempre vería esa cara por siempre.

El recuerdo despertó cuando por el fono decía: Manuel, Manuel estas ahí?????????? así que retome la conversacion asumiendo la nueva realidad, las cosas ahora son diferentes ahora ya solo la escucho por un teléfono cuando antes compartiamos vidas. Ella me enseño a ser honesto, la sinceridad era nuestra virtud que nos mantenía vivos. Me pesa decir pero es una virtud que ya no tengo.

Aun en la conversación telefónica recuerdo el numero de su telefónico de su casa y se lo digo: Tu numero fue el 4640047 (del año 92) Ella se ríe (como que es ajena al comentario) y recuerda el mío con mucha dificultad pero cambia radicalmente de tema.

Es raro ella siempre aparece en los momentos claves de mi vida es como si tuviera una chip o alarma dentro de su cabeza y se activa cuando me pasa algo trascendental, lo tengo claro.

Hoy mi relación con ella es de muy buenos amigos, me siento contento de conservar su amistad porque es la única persona que me conoce bien, En estas épocas me cuesta entablar una nueva amistad, me canso. Creo que es más fácil conversar con alguien que te conoce, mil veces prefiero conservar verdaderas y antiguas amistades.

Nos despedimos, colgué el teléfono y puedo decir que no me siento tan culpable de las cosas que hice y que anunciaron el fin de nuestra relación, ella y yo dimos lo mejor. Ahora es feliz (aunque a veces reniega por el día a día). Me siento orgulloso de que sea una buena madre de dos lindos niños y este casada con el esposo ideal que hace lo que sea por hacerla Feliz.

Respiro y siento que de a pocos mato a los demonios del pasado y sobre todo aprendo de los errores que en su momento cometí.

ROCO
Escrito 25/05/09

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